Como diseñadora, lo que veo constantemente ahora son clientes que han pasado mucho tiempo en Internet buscando en Pinterest, Houzz e Instagram los estilos que les encantan. Sin embargo, muchas veces los veo muy conflictivos y yendo en direcciones muy diferentes. Es cierto que crear tableros con imágenes de inspiración para diferentes habitaciones puede ser un buen ejercicio, pero también creo que puede provocar el mismo discurso que me encuentro muchas veces con los clientes. Ese discurso surge de ir a varias tiendas y comprar cosas que creen que les gustan solo para descubrir, cuando las llevan a casa, que no combinan con nada. Hacer esto una y otra vez crea habitaciones que no son habitaciones unidas o casas en las que no hay una visión y un diseño generales.
Como diseñadora, me encanta conocer los estilos que les gustan a mis clientes y descubrir qué es lo que los inspira específicamente. También quiero saber cómo utilizan su hogar y más sobre su estilo de vida para poder crear un espacio que se adapte a sus necesidades desde un punto de vista funcional. Nota al margen... Solía decir que todo es cuestión del diseño, a quién le importa la funcionalidad. Bueno, con los años he aprendido que se pueden crear ambas cosas.
La mayoría de las personas quieren entrar y estar rodeadas de cosas hermosas, pero también quieren sentir que pueden vivir en ellas al mismo tiempo. Lo llamo una "elegancia informal" que crea el escenario para la vida cotidiana, donde puedes llegar a casa y relajarte, pero que también se puede convertir fácilmente en un espacio para recibir invitados.
Me encanta crear la visión para mis clientes en función de los estilos que los inspiran y, al mismo tiempo, incorporar la funcionalidad que necesitan. Como diseñador, también me encanta pensar de manera innovadora y mi objetivo es llevar a mis clientes a un lugar al que nunca podrían ir por sí solos. Empujarlos un poco o, a veces, mucho más allá de su zona de confort, en mi opinión, es por eso por lo que me pagan y lo que crea un diseño general que es único. Esto requiere que el cliente confíe en saber que puedo visualizar todo junto y crear el resultado final que desea. Para mí, ver cómo evoluciona todo esto es como abrir regalos en la mañana de Navidad. Todos los meses y meses seleccionando y preparando cada pequeño detalle para cada espacio, todo unido y superando lo que cualquiera podría haber imaginado es lo que me hace amar, amar, amar mi trabajo.
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